Se lo denomina efecto Zeigarnik, porque fue descubierto por la psicóloga Bluma Zeigarnik. Ella descubrió que los camaroneros podían recordar una gran cantidad de pedidos, pero una vez que cumplían con ellos, los olvidaban. La psicóloga propuso 20 retos mentales a un grupo de voluntarios e interrumpió la mitad. Al finalizar, los hombres recordaban estas tareas con más claridad que las que habían resuelto.